Bare, tras un tiro de esquina en el cuarto minuto de descuento, decretó la derrota del equipo del Diez, cuyos tres tantos los anotó Mariano Donda, exNueva Chicago y Godoy Cruz de Mendoza.
El mediocampista argentino marcó el 1-1 parcial en la parte inicial; el descuento 2-3 y el 3-3 -ambos en el complemento-, que desató el festejo descontrolado del ex entrenador del seleccionado en el pasado Mundial Sudáfrica 2010.
Envuelto en la euforia, Maradona le dedicó el tercer gol de su equipo al DT rival, el belga Franky Vercauteren, con quien se enfrentó como futbolista en el Mundial México 1986.
El argentino Matías Delgado -ex Chacarita y Colón de Santa Fe- consiguió, de tiro libre, el segundo gol de Al Jazira -último campeón-, que además marcó a través de Diaky (penal) y el brasileño Ricardo Oliveira.
Al borde del campo de juego, Diego desplegó un repertorio de movimientos ampulosos ante cada acción del juego, que vivió con intensidad.
Cuando su equipo perdía 1-3 exigió con ademanes la reacción de sus dirigidos; luego protestó con vehemencia un penal al árbitro y hasta amagó con abandonar la cancha cuando su equipo desperdició claras chances para quedarse con la victoria en el tramo final del partido.
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